domingo, 6 de julio de 2014

Lacus a prima luce

¿Cuánto dolor se puede encontrar en la oscuridad?
Estas heridas soporosas que ningún medico puede curar, estas sangrantes llagas que gotean líquido carmesí. In der Morgendämmerung, las promesas en medio del placer carnal exaltado son recordadas,  después todo es silencio.
Este vacío previo al colapso de cuerpo, entre temblor y dolor... algunas veces quiero creer que no eres real, me imagino inmortal. ¿Existe un dios en la tierra? No lo se. Algunas veces pierdo a alguien. ¿Existe alguien en la tierra o en el paraíso? I dont know.
Plaisir charnel me rend fou.. luego llegas tú. Maldita!, mísera!, Me arrebatas todo y lo devoras, luego lo resguardas en tu vientre. Suena un Cello solitario y te presiento nuevamente. La esperanza en el juego irreal de la vida, de la mirada humana, esta humanidad etérea... sueños que se rompen con pesadillas, de lo sublime a lo espantoso. Lagrimas negras se escurren de entre mis mejillas, goteando la tierra sedienta de mi. ¿En donde estaremos? ¿En donde estamos? ¿En un infierno? ¿En un purgatorio? La felicidad de un novenario después del funeral. Rezos paganos salen de mis labios, rezos que se transforman luego en maldiciones  a ti. Plaisir.
La noche esta quedando atrás. Dormiré un poco, Me ocultaré de la luz y así podre olvidarte, negarte, evadirme, en este cementerio camposanto.